verdades

un camino real y un espejo
donde tus ojos color del tiempo
te avisan
si en tu alma llueve
o es primavera

una mochila cargada
y un Bukowski en la mano
manchada
ensangrentada
con las copas rotas de la noche anterior

y el corazón a veces camina solo
desamparado,
aniquilido,
...por ese pasar
inagotable, infinito
perpetuo
que es el tiempo
tan parecido al amor...

y el mar se llena de dudas
y la foto sigue pegada en el mismo lugar
tiritando tempestades de amores pasajeros
que regresan cada tanto
a tu caparazón
de niño malo
q cada tanto
se pierde en las noches mágicas
buscando su verdad

burbujas

una tela que cruza
y bordea el cielo como un espanto
mientras que las burbujas del vino blanco
bailan al compás del tango
ese tango inquieto de amores malevos
y besos rotos
un manjar de pinceladas cubren
las escaleras al infierno
que cierra y abre la puerta desenfrenadamente
una pintura que llora
y otra q vuela
y el sonido silencioso de las olas

y un mientras tanto fugaz
y un por ahora encubierto como espejos
y unas manos que te invitan
a caminar

un despertar
y el reflejo atravesando las paredes descoloridas
y un perfecto diseño de las cosas
sin analisis previo
y una trompada inconsiente
de sueños imaginados...

labios

labios dañados
violados
arrastrados por el viento
y por el sol maligno
manchas
q desangran
voluntades
sabores
y besos

hoy

ida
vuelta
borrón
y una vuelta más
bailando eternamente
con las sombras
y las esquinas desconocidas
y las personas, tantas
q pasan por los días
y algunas quedan
y otras marchan
y yo q vuelvo
cada tanto
por segundos
a la calma
q me calma
cuando la calma
no me calma

movimiento
continuación
vibraciones
y el renacer
de uno mismo
cuando en el camino
sigo riendo!

nostalgia

un relámpago
y un tren alcanzado
por un sinfín de rostros ajenos
del otro lado,
las calles de tierra
y el aire de los pájaros
y esa niñez propiamente mía

y reconozco la plaza
y los juegos descascarados
y el almacén del viejo verde
y la intrépida subida a los árboles

y las 12 para ir a la escuela
con la corbata desilachada
y el pequeño despeinado
y la polenta recalentada
y las medias un poco sucias

y yo,
q cada tanto me traslado
al barrio El gaucho
a la gris y blanca vereda
q vió dar mis primeros pasos

si te acordas....

si te acordás
traéme el ruido del mar desde la cama
la sombrilla amarilla protectora
y el sol ardiendo incesante sobre mi cuerpo

y si te acordas, traéme también
la orilla
y el juego permanente de risas entre las olas
con esa niña q gritaba, indecisa
sin saber que hacer con la llegada,
violenta, de cada oleaje maldito,
lleno de espuma
que nos dejaba ahí, en la orilla misma
desnudas de cordura... y de malla...

traéme el aire, como sea
en las bolsitas de El dorado quizás entre
y los bichitos de luz
y la caminata lunar, también.

traéme las lecturas
y las pilsen de las siete
cuando el sol cae
y las ollas comienzan a arder

y si te acordás
traéme el silencio
si, ese, el de la lejanía del océano....
y los berberolos
y la arena
y el camino a las maravillas
y el porfio, pero con puerta.

y si te acordas
no te acuerdes de las moscas
q será lo único q no extrañe
de allá....