miércoles, octubre 22

octubre maldito

terrazas vendadas de rastros tangueros
cantan a la luz del cielo miradas que nos abrigan
y a lo lejos se escuchan melodías de mujeres
que alzan sus voces desesperadas...

días de amores malditos y secuestros inesperados
bocas pintadas dulcemente y pieles tocadas
por la abrupta maldad de la noche.
por el silencio de la noche
por la soledad de la noche...
por la terquedad de los amores imposibles
y de las mujeres que aman otras mujeres
y de las mujeres que no olvidan el pasado
y de las mujeres envueltas en paranoias inconclusas.

y de repente, la calma.
y al otro dìa, el clamor del día y de la noche
y de las llaves que no abren
y de los caminos equivocados

y en el medio de la guerra
el tiempo calma las obsesiones
y las pastillas los miedos
y los tatuajes, la lástima ajena.